Baile suelto
Tres son las formas básicas de baile suelto en sus diferentes variantes; las jotas, los fandangos o más comúnmente denominadas malagueñas, en las diferentes tonalidades en las que se interpretan en el Noroeste de Murcia y la Sierra del Segura (de arriba, cifrá, de los tangos, de Juan Breva), así como las diversas formas de seguidillas (gandulas, manchegas, pardicas, parrandas, peretas, poblatas, etc.).
Podríamos decir que Bullas es una zona donde geográfica y culturalmente confluyen la comarca del Noroeste murciano con las Tierras Altas de Lorca, y por lo tanto nos llegan influencias musicales de distintas y variadas procedencias, desde la sierra segureña hasta el poniente almeriense.
Pedimenta
La pieza musical característica con la que los animeros solía pedir limosna para las ánimas del Purgatorio cuando llegaba el mes de diciembre son las llamadas animeras, también llamadas aguilanderas o más comúnmente aguilandos cuando la temática es exclusivamente navideña.
Dentro de un patrón musical común, existe una gran variedad de animeras y aguilandos, pudiendo afirmarse que prácticamente cada localidad tiene uno característico suyo. Este es el caso también de Bullas.
Auroros
Dos son las piezas que han ejecutado tradicionalmente los auroros en Bullas durante sus salidas y «dispiertas».
En primer lugar las salves, de carácter exclusivamente devocional mariano, y las coplas, composiciones más breves originalmente relacionadas con el rezo del Rosario, pero que acabaron diversificando su temática, pues las hay de temática pasional, de santos, escatológicas, etc.
